Guerra en Israel: principio de dolores – Pastor Luis Bravo

El Evangelio según Mateo, en su capítulo 24, presenta un relato apasionante de Jesús discutiendo con sus discípulos acerca de los últimos tiempos y los signos que precederán a su segunda venida. Entre estos signos, Mateo 24:6-8 destaca por su relevancia profética y su continua resonancia en la reflexión teológica contemporánea.

Mateo 24:6-8 (RVR1960): «Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares. Y todo esto será principio de dolores.»

Video:

Estas palabras de Jesús son inquietantes y, a la vez, esclarecedoras. Revelan la inevitabilidad de los conflictos y desastres como precursores de un tiempo de aflicción y juicio. Examinemos más de cerca el significado y la relevancia teológica de estos versículos.

1. Guerras y Rumores de Guerras: La referencia a las guerras y rumores de guerras sugiere un estado constante de conflicto y agitación en el mundo. Este fenómeno no es nuevo en la historia humana, pero Jesús lo presenta como un signo específico de los últimos tiempos. En un mundo plagado por la guerra y la violencia, esta advertencia resuena con urgencia en la conciencia contemporánea.

2. Nación contra Nación, Reino contra Reino: La escalada de conflictos a nivel internacional es una realidad que continúa desafiando a la humanidad. La rivalidad entre naciones y el deseo de poder han llevado a innumerables guerras y disputas a lo largo de la historia. Esta profecía nos recuerda la persistencia de la división y la hostilidad entre las naciones, y nos insta a buscar la paz y la reconciliación como un testimonio del Reino de Dios.

3. Pestes, Hambres y Terremotos: Junto con los conflictos armados, Jesús predice la aparición de pestes, hambres y terremotos como señales de los tiempos finales. Estos desastres naturales y enfermedades mortales han asolado a la humanidad a lo largo de los siglos, pero su frecuencia e intensidad parecen haber aumentado en la era moderna. Esta parte de la profecía nos llama a la compasión y solidaridad hacia aquellos que sufren a causa de estas calamidades, así como a una reflexión sobre nuestro papel en el cuidado de la creación.

4. Principio de Dolores: Jesús describe estos acontecimientos como «principio de dolores», lo que sugiere que son solo el comienzo de un período de sufrimiento y tribulación que precederá a su retorno. Esta metáfora del parto implica que, aunque los tiempos venideros serán difíciles, también anticipan el advenimiento de algo nuevo y redentor. Esta esperanza en medio del sufrimiento es fundamental para la fe cristiana, que mira hacia adelante con expectación a la consumación del Reino de Dios.

En resumen, Mateo 24:6-8 ofrece una visión penetrante de los desafíos y las pruebas que enfrentará la humanidad en los últimos tiempos. Sin embargo, también nos recuerda que, incluso en medio de la adversidad, podemos encontrar consuelo y esperanza en la promesa de la venida del Señor Jesucristo. Esta profecía nos llama a vivir con vigilancia y preparación, mientras nos esforzamos por vivir de acuerdo con los valores del Reino de Dios en un mundo marcado por la discordia y el sufrimiento.